Categorías
Reyes

Ordoño II de León

Ordoño II de León

Ordoño II de León

Ordoño II (Hacia 871 – Zamora, 924) fue rey de Galicia (subordinado al rey de León) entre los años 910 y 914, y rey de León desde el año 914 hasta su muerte.
Segundo de los hijos de Alfonso III el Magno, rey de Asturias y de su esposa, la reina Jimena. Por parte paterna era nieto del rey Ordoño I del cual recibió el nombre en su honor. Hacia el año 896 Ordoño contrajo matrimonio con Elvira Menéndez, perteneciente a una de las familias gallegas más importantes de la época, y poco después, en el año 897, fue nombrado gobernador de Galicia por su padre el rey Alfonso. Dicho nombramiento, ha sido considerado indicio de los deseos de Alfonso III de asociar a su hijo al trono, puesto que desde los tiempos de Ramiro I, el cargo de gobernador de Galicia había sido ocupado por el heredero a la corona.

Ordoño II, iniciado desde muy joven en la estrategia militar, era también muy instruido en la diplomacia. Tenía, asimismo, fama de justo y misericordioso con los ciudadanos, de piadoso y entrañable para con los infelices y los pobres, y de honesto en los negocios concernientes a la administración del reino.
Fue un soberano que destacó por su caracter enérgico y batallador, al que los musulmanes apodaban como «el Guerreador», que en muy poco tiempo sometió a su autoridad los territorios del reino leonés y combatió exitosamente contra los musulmanes, que aún dominaban la mayor parte de la Península Ibérica. Con la sede regia ya establecida definitivamente en la ciudad de León, su reinado supuso el tránsito tácito y tranquilo del regnum asturum al regnum Legionis. Desde su llegada a Galicia demostró sus grandes dotes como gobernador: fue capaz de imponer su autoridad en el territorio y sometió al pago de tributo a todas las ciudades, ganándose además el respeto y el cariño de todos sus súbditos. Hacia el año 908 dirigió una expedición militar en contra de los musulmanes de la Bética, en la que consiguió un importante botín, gracias a que asoló prácticamente la ciudad de Regel y sus territorios circundantes.
A la muerte de su hermano García, ocurrida en la ciudad de Zamora en el año 914, Ordoño II heredó el reino de León ya que su hermano había falleció sin dejar descendencia.

Al igual que sus hermanos, a pesar de que de hecho era rey de Galicia desde que su padre renunciara al trono, no adoptó oficialmente el título de rey hasta la muerte de éste, el 10 de diciembre del año 910.
Durante sus años como monarca en Galicia, se llevó a cabo sin problemas la reconstrucción y repoblación de la ciudad de Lugo y fueron frecuentes las donaciones realizadas por los monarcas a la iglesia compostelana. Animado por el éxito de su anterior campaña, en el año 913 inició una nueva expedición militar por tierras de al-Andalus, concretamente a la ciudad de Evora, donde los ejércitos cristianos obtuvieron una importante victoria. Por lo que respecta a sus hermanos, sí bien el futuro Fruela II mantuvo una relación amistosa con Ordoño, García I nunca perdonó a éste que se hubiera proclamado rey de Galicia, por lo que las relaciones entre ambas cortes fueron muy tensas durante estos años.

Tras la muerte de su hermano García I, Ordoño, rey de Galicia, vino a la ciudad de León a ser ungido y coronado, en una fecha de finales de 914, posiblemente el 12 de diciembre, en presencia de los nobles, prelados, abades y de hasta los doce obispos más importantes del reino y desde este momento comenzó para los cronistas el cómputo oficial de los años de su reinado. Ordoño II en agradecimiento por las victorias en sus batallas, cedió al obispo Fruminio II su sede palatina como templo a modo de ofrenda a la Virgen Maria, comprometiendose a financiar la construcción de una catedral para la capital de su reino, además hizo todo lo posible por reorganizar el territorio de la diócesis, por lo que también financió la reconstrucción de iglesias y conventos. Por su parte, Ordoño II construiría un nuevo palacio en el llamado Palaz de Rey o Palat de Rey, lugar que conserva su nombre en la actualidad.
En memoria de tan generosa donación que cambio el trono y palacio real por altar y templo de Santa Maria, se celebra cada año en la Catedral una misa por el alma de este rey, lo cual constituye una tradicion milenaria dificil de encontrar en otra parte del mundo.

En el año 916 preparó una nueva campaña militar por tierras extremeñas. Así tras cruzar el Guadiana logró una nueva victoria frente a las tropas musulmanas, que habían sido reforzadas por un poderoso contingente enviado desde Córdoba. La humillación de los cordobeses fue tal que Abd-al-Rahman III, no tardó en reunir un nuevo ejército, en agosto del año 917, para atacar las fronteras cristianas, pero sus esfuerzos fueron inútiles, ya que Ordoño, tras conocer la noticia de la llegada de un ejército enemigo a sus territorios, decidió presentar batalla y atacó por sorpresa el campamento enemigo instalado en San Esteban de Gormaz o Castromuros, destruyéndolo casi por completo en septiembre de ese mismo año.
Aprovechando la moral de su ejercito tras las sucesivas victorias obtenidas sobre los árabes, Ordoño junto a su aliado el rey Sancho Garcés I de Navarra, decidió en la primavera del año 918 llevar a cabo una nueva campaña en contra de la ciudad de Nájera. En esta ocasión el rey Ordoño no obtuvo los resultados previstos, ya que tras conseguir un cuantioso botín en Nájera y en Tudela, su ejercito sufrió una tremenda derrota en la batalla de Mutonia.

En el mes de octubre del año 919 el rey Ordoño organizó una nueva campaña, pero la rápida reacción de las tropas musulmanas le obligó a replegarse. Sin embargo, a pesar de la victoria de los cordobeses, Abd al-Rahman III no estaba dispuesto a tolerar por más tiempo las incursiones del rey de León en sus territorios, por lo que decidió acabar con estos ataques personalmente. El 23 de abril del año 920 partió de Córdoba al mando de un poderoso ejército que realizó una brillante campaña por tierras cristianas, enfrentándose finalmente a las tropas de Ordoño y de Sancho Garcés en la batalla de Valdejunquera, donde obtuvo una importante victoria.
A pesar de lo que cuentan las crónicas árabes las pérdidas de los cristianos no debieron ser tan cuantiosas como afirmaron, ya que poco tiempo después, ambos monarcas pudieron reorganizar su ejército y marcharon sobre Guadalajara donde lograron obtener un cuantioso botín. Luego Ordoño II partió hacia la ciudad de Zamora, donde a su llegada recibió con gran tristeza la noticia de la muerte de su esposa Elvira.
Tras estos acontecimientos, marchó a Castilla con el fin de acabar con la rebeldía de algunos condes de este territorio. Al llegar a Burgos convocó una reunión en Tejar, lugar donde fueron detenidos poco después los condes Nuño Fernández, Aboldomar Albo y su hijo Diego, y Fernando Ansúez, aunque no duró mucho su cautiverio. Por estas mismas fechas contrajo matrimonio por segunda vez el monarca con una joven llamada Aragonta González, la cual fue repudiada a los pocos meses por no ser de su agrado.
A finales del verano del 923 retoma su actividad militar, acudiendo a Navarra para respaldar a su aliado Sancho Garcés, en los planes que tenía de atacar las fortalezas de Viguera y Nájera. En esas campañas obtuvieron notables resultados y Ordoño II, en agradecimiento por su triunfo, fundó del monasterio de Santa Coloma. Las relaciones entre ambos reinos no podían ser más cordiales, y se concertó el matrimonio del monarca leonés con doña Sancha, una de las hijas de Sancho Garcés, convirtiéndose en su tercera esposa ese mismo año, aunque el matrimonio duró apenas unos meses puesto que el rey Ordoño falleció a principios del verano siguiente.
La muerte de Ordoño II se produjo en Zamora el 20 de junio de año 924, contando el rey con 52 años y por causas naturales. Tras su muerte sus restos fueron trasladados a la ciudad de León, donde fueron enterrados en la iglesia del Salvador que el mismo había mandado construir. Poco días después su hermano Fruela II se proclamó rey.

Matrimonios y descendencia
Contrajo matrimonio por primera vez con Elvira Menéndez, hija del conde Hermenegildo Gutiérrez y de Ermesenda Gatónez, hija de Gatón del Bierzo. Fruto de su primer matrimonio nacieron cinco hijos:
– Sancho Ordóñez (m. 929). Rey de Galicia.
– Alfonso IV de León (m. 933). Rey de León.
– Ramiro II de León (m. 951). Rey de León. Ocupó el trono leonés cuando su hermano Alfonso IV renunció al mismo.
– Jimena Ordóñez (m. después de 935).
– García (m. después de 934).
Casó en segundas nupcias en el año 922 con Aragonta González, hija del conde Gonzalo Betótez y de la condesa Teresa Eriz, con quien no tuvo descendencia, pues fue repudiada por el rey a los pocos meses de su matrimonio.
Por último contrajo matrimonio con Sancha de Pamplona, hija del rey Sancho Garcés I de Pamplona, en el año 923, con quien tampoco tuvo descendencia.

Fuente:
Wikipedia

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.